miércoles, 11 de marzo de 2009

La obesidad también afecta a nuestras mascotas

La vida sed e n t a r i a que vivimos en nuestra sociedad, la falta de ejercicio y la gran variedad de alimentos y golosinas disponibles para animales, no sin dejar de mencionar el mal hábito de algunos de nosotros de alimentar sobras de mesa a nuestros animalitos, ha creado un problema bastante serio de incremento de peso de nuestras queridas mascotas. La obesidad trae como consecuencia una serie de enfermedades, algunas muy serias que pueden poner en peligro la vida de nuestros animalitos. Estas enfermedades son; La diabetes, la lipidosis hepática, el hipotiroidismo, la pancreatitis, algunas enfermedades cardiacas, los lipomas, problemas de ruptura de ligamentos y muchas otras enfermedades. Crear conciencia de esta situación es el papel principal de los profesionales de la salud animal, así como de los promotores del bienestar animal, pero todos debemos unirnos al esfuerzo y poner nuestro granito de arena para evitar que nuestras amadas mascotas sufran daños irreparables a su salud. Recordemos que la comida y las golosinas nunca podrán sustituir el cariño y la atención que nuestras mascotas requieren. A veces, cuando creemos que ellas están pidiendo comida lo que, actualmente, desean es un poco de cariño y atención. Para evitar o controlar la obesidad se aconseja lo siguiente: 1) Evite dar a su animalito sobras que han quedado en su mesa. 2) Proporcione una dieta balanceada. 3) Utilice una taza de medir (con medidas marcadas). 4) Proporcione solo la cantidad de alimento proporcional al tamaño de la mascota. 5) Solo utilice croquetas o golosinas de baja caloría y en cantidades pequeñas. 6) Lea las instrucciones y alimente de acuerdo al peso deseado, no de acuerdo al peso actual. 7) Consulte con su veterinario y lleve a su mascota periódicamente para un chequeo y registro del peso. 8) Salga a caminar o juegue con su mascota para activar el metabolismo. 9) Proporcione al animal agua fresca todo el tiempo. 10) Saque a su mascota de la casa o póngala en una habitación a la hora de que usted y su familia toman los alimentos. 11) No haga cambios bruscos de marcas de alimentos. 12) Evite las compras impulsivas de alimentos o golosinas para animales. 13) No deje comida disponible todo el tiempo, sino que alimente 2 veces al día a los adultos y 3 veces al día a los animales jóvenes menores de 8 semanas. Los malos hábitos son difíciles de cambiar, pero con un poquito de esfuerzo podemos ayudar a nuestras amadas mascotas a vivir una vida más sana.

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